Centro comercial de altas especificaciones llega a Bogotá
Con una inversión que supera los 780 mil millones de pesos, Titán Plaza Centro Comercial y Empresarial se convierte en el producto comercial de mayor desarrollo en la historia de Cusezar S.A y Ospinas & Cía., dos de las empresas líderes del sector inmobiliario y de la construcción en Colombia.
Titán Plaza que estará listo a finales de año, presenta un modelo de negocio innovador ‘oficinas exclusivamente para arriendo’, lo cual brinda a las compañías arrendatarias beneficios como flexibilidad en el área requerida y una administración profesional del inmueble.
Con un área total de construcción de 179.000 metros cuadrados y más de 2000 parqueaderos, Titán Plaza se convierte en el centro comercial con la mejor oferta y ubicación estratégica de la ciudad. Titán Plaza cuenta con 250 locales comerciales, y un gran universo de productos de entretenimiento, moda, hogar, comida y diversión.
El proyecto ha sido fuente de recepción de inversión extranjera directa para el país. El 25 por ciento del total de la inversión por parte de los compradores de locales es capital extranjero.
Según Andrés Arango, Presidente de Ospinas, el propósito fundamental de la compañía es crear desarrollos de gran escala, innovadores y rentables, que se conviertan en referentes y desencadenen procesos positivos de transformación urbana.
El proyecto fue diseñado para brindar a los bogotanos no sólo una oferta comercial única en el país, y un lugar de entretenimiento y esparcimiento, sino un centro comercial sostenible que transformara urbanísticamente el sector. Con esta premisa, Cusezar y Ospinas después de establecer que la zona moviliza más de 1 millón de personas diariamente por sus vías, de manera voluntaria aportaron a la ciudad más de 15 mil millones de pesos en obras públicas, ejecutadas en coordinación con el Distrito, que con su puesta en operación contribuyen a mejorar la movilidad.
Estas obras suman en total cerca de 50 mil metros cuadrados de espacio público intervenido y construido en la zona, lo que representa un regalo para la ciudad de más de 5 veces la plaza de Bolívar.
La más ambiciosa y significativa intervención se adelantó en la Av. Boyacá, la avenida de mayor longitud de la capital, la cual se amplió a seis carriles a la altura del centro comercial y se amplió a un cuarto carril desde la calle 83 hasta la calle 116. Así mismo, se construyó y se puso al servicio de los bogotanos en días pasados un nuevo puente vehicular, ampliando el actual sobre el canal Juan Amarillo.
Por otra parte, sobre la calle 80 se construyó el cuarto carril de la calzada mixta norte de la Avenida, con la que se mejoró la capacidad vial del corredor, y se construyó una plazoleta, ciclorutas y amplios andenes de 20 metros de ancho, aportando nuevo espacio público en este frente.