Durante el primer trimestre del próximo año se iniciará la construcción de El Edén, en el occidente de Bogotá, que tendrá 320.000 metros cuadrados, 134 mil de ellos de área comercial.

No solo será el centro comercial más grande del país, sino que manejará un modelo de negocio en el que solo hay un propietario y operador.

Según Gabriel Mesa, presidente de Construcciones Planificadas, empresa de la Organización Luis Carlos Sarmiento Angulo (OLCSA) que estará a cargo de la obra, esto significa que no se venderán los locales. “Se arrendarán, y su manejo estará a cargo de la OLCSA”.

Esta figura, que se ha impuesto en el mundo, permite que los comerciantes destinen sus recursos a su negocio y no necesariamente a un activo inmobiliario. Para el directivo, la ubicación es otro de los valores agregados: está en la intersección suroriental de la Avenida Boyacá con calle 13, en el occidente de Bogotá, cuya oferta residencial y empresarial ha crecido.

De hecho, allí se desarrollaron las urbanizaciones Ciudad Alsacia, Castilla y La Felicidad, y muy cerca está la zona industrial de Montevideo, entre otras.

Una ventaja adicional de la obra, en la que se invertirá un billón de pesos, es su área de influencia conformada por 2,6 millones de habitantes de los estratos 2, 3 y 4.

“Es un segmento con más poder adquisitivo, que está demandando productos y servicios”, anotó Mesa, quien recordó que hasta ahora Centro Mayor, en el sur de la ciudad, ostentaba el récord del centro comercial más grande del país con 114.000 metros cuadrados de área para locales y 248.000 construidos. Finalmente, el directivo destacó el diseño realizado por la multinacional Chapman Taylor, que se ha especializado en crear espacios temáticos para este tipo de proyectos.

Con esa premisa, la compañía creó para El Edén el Mundo Cristalino que evoca, en cada plaza una piedra preciosa.

Aporte verde a la ciudad

La recuperación paisajística de la zona verde de la ronda del canal del río Fucha es otra de las novedades del proyecto, que traza recorridos con jardines exteriores, ciclorrutas y senderos peatonales. Parte del aporte verde del centro comercial también está representado en la precertificación estadounidense de Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental (LEED) en la categoría plata, por cumplir desde la etapa de diseño criterios y estrategias sostenibles.

Gabriel E. Flórez G. Economía y Negocios